“El Retiro está lleno de Castañedas, tanto así que en la Banda hemos tenido cerca de 30 Catañedas”, dice Jesús Horacio Bedoya, director de la misma desde 1991, que por parte de su madre legó también el famoso apellido.
Músico de vieja data, ya desde los 7 años “tocaba el himno de El Retiro y otras cancioncitas”, según él mismo nos cuenta. Y complementa con una historia bien simpática: su papá, que por aquel entonces tocaba también en la banda, lo presentó a don Luciano Bravo Piedrahita, eminencia que dedicó su vida entera a la música, mitad del popular dueto “Luciano y Concholón”, para que le enseñara a tocar. Cuenta Horacio (como le gusta que le llamen), que “don Luciano me miró muy serio y me dijo: abra la boca y muéstreme los dientes”. Cuando se los vio, al encontrarlos parejos, concluyó que el chico “servía para tocar trompeta”, el que terminó siendo su instrumento favorito, aunque toca bastantes más.
Desde entonces, el camino de Horacio junto a la banda por la senda musical no ha parado de ascender. Con la Banda de El Retiro consiguió logros como el Concurso Nacional de Bandas de Música de Paipa en 1994, el más importante de todo el país, evento en el que fue elegido además Mejor Director. Este mismo año obtienen el primer puesto en el Concurso de Bandas Musicales en Anapoima y le otorgan el premio a la mejor interpretación de la obra obligada, el bambuco “Anapoima”. En 1995 vuelven a ganar en Anapoima, y este mismo año reciben la Medalla al Mérito “Pedro Justo Berrío” de la Gobernación de Antioquia. En el 96 los declaran “fuera de concurso en Anapoima”, donde vuelven a triunfar en el 99, al igual que en el 97 en Paipa.
Como puede verse, la de Horacio y la Banda de El Retiro es una vida colmada de triunfos, al igual que la de las famosas Retretas, nacidas justamente en 1991 y que tienen lugar el primer sábado de cada mes en el Parque Principal, donde siempre altiva, la propia Banda, junto a otros artistas locales e invitados, hacen gala de su capacidad para alegrar la noche con música, baile, cultura y tradición.
Esta comunión de más de 30 años entre la principal representación musical del municipio con sus habitantes es toda una institución en El Retiro y una invitación a disfrutar de su cada vez más robusta oferta artística y cultural.